Cuando alguien se va, sigue estando junto a ti aunque no puedas verlo

Cuando alguien se va, no se va solo, se lleva una parte de tu alma para componer sus alas, de esta forma logra volar cerca de ti. Cuando alguien se va, se lleva tu voz y escucha con atención, de esa forma logra guiarse en el camino.

Cuando alguien se va, se lleva los recuerdos, de esta forma se ríe por el camino para no aburrirse. Cuando alguien se va, no te deja solo, te deja parte de su alma, de esta forma sabrá que estás bien.

Cuando alguien se va, te deja su voz, de esta forma sera tu conciencia. Cuando alguien se va, te deja los recuerdos, de esta forma reirán juntos.

Cuando alguien se va, sucede algo increíble e inexplicable “no se quiere alejar”, entonces cambia de cuerpo para estar junto a ti. Busca en los demás, una pequeña parte de él o ella. Busca bien porque lo encontrarás, hay muchas personas que falta aún por conocer, muchos de ellos tendrán parte de esa personas especial. Ábrete a gente nueva, haz más amistades, llénalos de alegría, llora y ríe con ellos.

Cuando alguien se va, suceden cosas extraordinarias, ya que él tampoco se quiere alejar. Cuando se te nubla la vista, es quien pasa frente a ti sin darte cuenta, cuando sientes escalofríos, es quien te abrasa sin darte cuenta, cuando sientes frío durante la noche, es quien te arropa sin darte cuenta, cuando tropiezas, es quien te mete el pie para reír juntos sin darte cuenta, cuando te ríes de la nada, es cuando te dice un chiste y ni cuenta te diste.

Cuando alguien se va, no es para que te pongas triste, sabemos que es algo muy difícil y complicado de entender, pero la verdad es que él o ella están mucho mejor allá, y quien mejor para guiarte mientras llega tu momento de partir, pues espera con ansias ver tu rostro para abrasarte, compartir y reírse contigo nuevamente.

Debes tener presente que cuando alguien se va, aún sigue estando junto a ti aunque no puedas verlo.

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